dimecres, 4 de juny del 2014

Planeta de reyes


Érase una vez un magnífico reino formado por vastos territorios de gran belleza; un antiguo imperio de enormes riquezas y voluntades férreas, forjado a base de lejanas y valiosas conquistas.

Un rey benévolo y longevo gobernaba este paraíso, cruce de culturas encontradas. 

Era este reino un hervidero de viajeros y comerciantes de todas las razas y colores, que transitaban antiguas rutas comerciales: caminos que unían el norte y el sur por tierra firme, y occidente con oriente, por mar. Un enredo de religiones y lenguas desconocidas levantaban templos a su paso, soliviantando las creencias establecidas.